Hace ya un tiempo que conozco y sigo con mucho interés los eventos iWeekend así como sus primos cercanos, léase por ejemplo startupweekend, y creo recordar que fue Fabián López Coloma, cofundador de ecommaster.es director del mismo y reconocido empresario turronero digital, quien me habló por primera vez de este evento. Desde entonces siempre había tenido la curiosidad de participar, pero nunca había priorizado tanto un iWeekend como para dejar de lado otro tipo de actividades de mi divertida y ajetreada agenda. Tras conocer a César Mariel de Cadenalia el año pasado gracias a un evento que organizamos en ecommaster.es, y a comenzar a gestar una posible actividad similar centrada en el mundo del e-ecommerce, decidí que no podía tomar decisiones organizativas en una tipología de evento en el que nunca había tomado parte, así que haciendo caso omiso a mi tradicional cena de cumpleaños el día 26 de Abril, tomé la determinación de participar en el iWeekend Benidorm presentando una idea que no tenía, y que me propuse sacar adelante a base de obligarme a pensar durante un desayuno entre bocado y bocado de una tostada.
Y de esta forma tan poco épica nació el proyecto Bcarefool.com y así realicé mi inscripción el sábado anterior. Cuando me presenté el viernes 26 en Invat.tur, lugar de celebración del iWeekend, el ambiente no podía ser mejor: un montón de gente nueva, alegría, nervios, algunos alumnos de ecommaster.es, café (aunque yo bebí té), ensaimadas, y buenas ideas. Me senté en la segunda fila al lado de una persona que llevaba una camisa prácticamente igual a la mía y esperé mi turno mientras iba anotando en una libreta las ideas de negocio que en tan solo 3 minutos iban contando mis compañeros desde el escenario… Hasta que los organizadores me llamaron al estrado.
Y aquí pasó algo que no me habría imaginado, y es que con un inicio tan épico y serio en mi discurso como: Voy a presentar una idea para hacer del planeta un lugar más seguro la audiencia tomó la unánime decisión de que aquello iba ser muy divertido, con lo que se repitieron hasta 3 interrupciones con carcajadas durante mi exposición que son deudoras de haber utilizado en mis ejemplos a Pedro Luis Chinchilla con el proyecto que está desarrollando en ecommaster.es sobre camisas de fuerza para uso erótico, que todos sabemos que habría sido el ganador de esta edición su hubiese querido presentarlo.
Después de aquella primera ronda con unas 22 ideas, creo recordar, tuve la suerte de quedarme en los 7 finalistas, y tras mi segunda exposición de 5 minutos contestando las preguntas de los mentores logré alzarme como uno de los 4 proyectos seleccionados. Recuerdo que en ese momento, todavía entre los aplausos del público, busqué con la mirada a Oliver Montes y José Ruzafa, dos desarrolladores que acababa de conocer hacía poco más de 1 hora y que sabía que iban a ser piezas clave en un proyecto con una carga tecnológica muy fuerte. Y de esta forma llegamos al final del día 26 con un nombre que no gustó a casi nadie y que yo mismo me prometí cambiar. Contar todo lo que sucedió al día siguiente es imposible, más que nada tengo agradecimiento para todos y especialmente para Jaime Agulló, que no sabía que se iba a unir a nuestro grupo hasta el último momento, y que aportó una visión muy experimentada a la sesión.
Pero como nombrar a unos pocos es injusto, he de decir que todos las personas que integraron el equipo de negocio/financiero, el de desarrollo web y el de creatividad/marketing, se merecen un homenaje por su dedicación desinteresada. Desde las 9 de la mañana a las 6 de la tarde creo que caminé 15Km en una sala de 100m2 porque mi trabajó consistió en poner tiempos a todos y asignar recursos saltando de una conversación de financiero a otra sobre la imagen corporativa, y de una de usabilidad a otra de comunicación en medios, amén de las broncas que me pegaba César Mariel cada vez que entraba en la sala (si lo tuviese en mi empresa todos los días creo que sería el triple de productivo). Fue también curioso ver como Roxanne y Pablo, los dos más jóvenes del equipo (estudiando 1º de carrera de Ingeniería Multimedia) se presentaron a primera hora diciendo que no podían aportar mucho al equipo porque no tenían experiencia, y finalmente acabaron ejecutando el logotipo y el vídeo corporativo con la inestimable supervisión de Jesús Gallent, haciéndome ver que en iWeekend a veces son más importantes las ganas que la edad y experiencia.
O también, como en el caso del equipo creativo con: Pedro Luis, Lola, Marina y José Manuel conseguir plasmar su estrategia subnormalísima mágica en un guion absolutamente loco y divertido. A las 6 de la tarde las 3 personas de desarrollo todavía estaban ultimando detalles y no nos dio tiempo a presentar la landing con la imagen que habíamos preparado de fondo, pero su implicación fue brutal hasta el último segundo. Entre tanto ya teníamos: Twitter, Facebook, dominio y sitio web con inscripción conectado a Mailchimp, mapas de calor de Alicante, estudio de mercado, estructura de la aplicación web, estrategia, borrador de comunicación, usabilidad y hasta financiero, en donde Noelia, Ruth, José y Fabián se estrujaron los sesos sopesando los diferentes modelos de negocio y formas de monetizar la aplicación.
Creo que fue una pena no poder hablar más con el resto de equipos porque aunque nos alzamos con el premio Invat.tur junto con otro proyecto denominado Itinerers la sensación fue que todos habíamos ganado 1 año de experiencia condensado en unas pocas horas. Curiosamente el ideólogo de ese otro proyecto ganador fue Jorge Mira Uclés, que era el hombre al lado del cual me senté el primer día y que llevaba una camisa blanca de rayas azules casi igual a la mía 🙂 ¿Coincidencia? El día acabó con una Coca Cola en el sofá del hotel de enfrente y una agenda llena de nuevos amigos y reuniones, así que solo puedo decir ¡Gracias a los organizadores! ¡Gracias a los mentores! ¡Gracias a mi equipo! ¡Gracias a todos! Y si queréis saber de que va al proyecto suscribiros a la web bcarefool.com.
